“No creemos en la talla única ni queremos exportar modelos de paz”

      
Esto afirma María Paulina Riveros al referirse al enfoque de género en los acuerdos. Ella, con un pie en La Habana como negociadora y otro enColombia en el Ministerio del Interior, también detalla cómo están identificando a los desaparecidos.

entrevista maria riveros 1María Paulina Riveros fue nombrada negociadora del Gobierno en noviembre de 2013. Además, es la directora de Derechos Humanos del Ministerio del Interior. Foto: VerdadAbierta.com.

VerdadAbierta.com (VA): Para usted, que es plenipotenciaria y encabeza la subcomisión de género del lado del Gobierno, ¿cuál ha sido el rol de las mujeres en estas negociaciones?

María Paulina Riveros (MPR): Cuando recibimos a las 60 víctimas que fueron a La Habana advertimos una diferencia. En los relatos de las mujeres se despierta un sentimiento de solidaridad impresionante con víctimas de los mismos hechos. Esto crea unos lazos que desembocan normalmente en organizaciones sociales.

VA: Pero de manera concreta, ¿cómo han participado las mujeres?

MPR: Este es el primer proceso de paz donde se propicia un escenario específico para que los acuerdos tengan un enfoque de género. Ninguna otra negociación en el mundo había tenido una subcomisión de mujeres y esta participación ha sido realmente activa.

VA: ¿Cómo? Del lado del Gobierno, por ejemplo, sólo hay dos mujeres de ocho negociadores.

MPR: En un estudio, la ONU analizó 38 procesos de paz en el mundo y el nivel de participación de las mujeres como negociadoras era del 7%, aquí hablamos de un 25%, con la canciller María Ángela Holguín y yo del lado del Gobierno. Y hay más niveles de participación.

VA: ¿Como cuáles?

MPR: En la delegación completa delGobierno, que incluye plenipotenciarios, asesores, etc., más del 80% somos mujeres.

VA: ¿Y en las Farc?

MPR: Más del 40% de su delegación, que es el mismo porcentaje de mujeres al interior de la guerrilla.

VA: ¿Cómo está compuesta actualmente la subcomisión de género?

MPR: Somos 12 personas: seis de las Farc y seis del Gobierno pero no siempre todas son mujeres. Del lado del Gobierno estamos la Canciller; Elena Ambrosi, que es la coordinadora temática de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, y yo. Somos permanentes las tres. Las otras dependen del tema que se trate. Ahora que hablamos del punto de víctimas hacen parte Paula Gaviria, directora de la Unidad de Víctimas; Catalina Díaz, directora de Justicia Transicional del Ministerio de Defensa y Juanita Millán, teniente de navío del Ministerio de Defensa.

VA: ¿Y por las Farc?

MPR: Eran cinco mujeres y un hombre. Digo eran porque con los niveles de rotación tuvo una modificación. Ahora siguen Victoria Sandino, que es quien encabeza la subcomisión por el lado de las Farc, y Alexandra Nariño. En el próximo ciclo nos presentarán los cuatro miembros.

VA: ¿Cómo hicieron para darle un enfoque de género a los acuerdos que ya estaban pactados?

MPR: Cuando se crea la subcomisión ya había dos puntos pactados, reforma rural integral y participación política, y estaba a punto de concluir el de drogas. Por eso uno de los dos mecanismos de trabajo ha sido revisar esos tres temas anteriores y hemos avanzado con las visitas de expertas nacionales e internacionales que han revisado los textos con nosotros. A partir de este ciclo ya tendremos reuniones de subcomisión para darle recomendaciones a la Mesa sobre textos concretos.

VA: ¿Cuál es ese primer resultado? ¿Los acuerdos se rajan o ganan el año en enfoque de género?

MPR: Sin habérselo propuesto, la Mesa sí logró muchas cosas que ya reflejaban un enfoque de género. No de manera premeditada sino natural.

VA: Ahora que hay varios grupos adelantando temas como el de fin de conflicto y justicia transicional, ¿cómo hacen para que se hable del tema de género?

MPR: También participamos en esas subcomisiones. Por decir algo, la Canciller está permanentemente en el grupo de seguridad. En el tema de minas hay mujeres muy importantes del BIDES (Batallón de Desminado Humanitario) y de cada experiencia aprendemos.

VA: ¿Alguna anécdota en particular?

MPR: En El Orejón las mujeres se organizaron y dejaron a una señora cuidando los niños mientras ellas iban a los talleres de los proyectos que están haciendo allá. Son respuestas espontáneas que nos servirán de ejemplo. Cuando la mujer vaya a participar en la implementación de acuerdos, tenemos que prever lugares donde los niños puedan estar bien.

VA: ¿Esto no los impulsa a apoyarse en los mecanismos que la gente ha utilizado en vez de crear unos diferentes?

MPR: No creemos en los modelos talla única ni queremos exportar modelos. La gente en Colombia, por la fuerza del conflicto, se ha visto obligada a buscar sus soluciones. La idea no es que lleguemos a imponer soluciones que no tienen nada que ver sino fortalecer esas soluciones, porque son las propicias para una situación específica.

VA: Usted tiene un pie en La Habana y otra en la dirección de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, donde están desarrollando un trabajo para identificar a los desaparecidos. ¿Esa labor oficial tiene en cuenta el eventual interés de las Farc en aclarar dónde están las fosas?

MPR: No hay una atadura directa pero este trabajo sí será fundamental porque una vez ellos participen, ya tendremos una experticia sobre qué hacer con los cuerpos y con las familias.

entrevista maria riveros 2Victoria Sandino y María Paulina Riveros encabezan la subcomisión de género del proceso de paz, por parte de las Farc y del Gobierno respectivamente. Foto: Tomada de www.pazfarc-ep.org.

VA: Ustedes han unido esfuerzos con la Registraduría Nacional para buscar a los desaparecidos. ¿Cómo ha sido esa labor?

MPR: El objetivo era poder darle un nombre y apellido a las necrodactilias que existían en Medicina Legal. En ese momento había 22 mil huellas de personas que no se sabía quiénes eran. Es una cosa muy loca. Hasta ese momento los trabajos oficiales habían logrado dar nombre y apellido sólo a 6 casos.

VA: ¿Y qué hicieron?

MPR: En un trabajo larguísimo cruzamos las necrodactilias de Medicina Legal con la información de la Registraduría. El resultado fue algo que jamás nos esperábamos: 9.968coincidencias. Que tengamos 22 mil personas que no sepamos quiénes son ni dónde están, es una cifra muy preocupante. Pero más alarmante, que en un ejercicio pudiéramos darle nombre y número de identidad a casi la mitad. Eso nos hizo abrir los ojos de que el problema de desaparecidos en Colombia es de unas dimensiones inimaginadas.

VA: ¿Todos ellos fueron víctimas del conflicto?

MPR: No sabemos. Todavía no podemos hablar de identificación porque es algo que viene más adelante.

VA: ¿Para qué sirve entonces ese nombre y apellido de las casi 10 mil personas?

MPR: Por lo menos en esos casos le podemos decir a la familia que esa persona a la que está buscando está muerta. Son hallazgos muy importantes para ver cuál será la política pública de búsqueda de personas desaparecidas en Colombia. No es tomarlo como un simple resultado estadístico sino como una advertencia, pues los datos indican que hay una situación que tenemos que descubrir. Hay muchísimas personas muertas que no se sabe quiénes son y dónde están.

VA: Pero la Fiscalía ya ha encontrado más de 6 mil cuerpos por las confesiones de los paramilitares en Justicia y Paz.

MPR: Sí. Esa es una fuente para descubrir dónde pueden estar esas personas. Habrá unas en fosas comunes pero desde la perspectiva oficial hay un sitio al que no se le ha prestado la más mínima atención: los cementerios.

VA: ¿Y ustedes ya comenzaron a buscar allí?

MPR: Sí y fue otro hallazgo tremendo. En 228 municipios hemos visitado 234 cementerios de los más de mil que pueden existir en todo el país. Allí encontramos 5.962 personas inhumadas sin identificación y 1.354 personas que sí están identificadas pero que no han sido reclamadas. Además, de las 9.968 personas a las que le habíamos dado nombre y apellido, fue posible entregar a sus familias aproximadamente 160 restos en condiciones de dignidad.

VA: ¿Conocen el contexto en el que murieron las víctimas?

MPR: La Fiscalía lo sabe pero eso ya escapa al propósito de ese primer ejercicio.

VA: Entonces todavía no se puede hablar de desaparición forzada en todos los casos.

MPR: No y no es posible saberlo hasta que se haga un proceso de inhumación y búsqueda de la verdad a través de los distintos medios. Una, es la verdad judicial… el paso siguiente es empezar con Fiscalía.

VA: ¿En qué condiciones estaban esos cuerpos?

MPR: Hay de todo. Fosas donde los huesos están mezclados son irrecuperables. Otros cementerios han tenido administraciones muy juiciosas y tienen a las personas enterradas en la tierra o en pared. Es importante esa manera de enterrar porque los restos tienen que ser conservados de una debida manera para que algún día se pueda entregar el cuerpo de manera digna.

VA: ¿Dónde hay más muertos sin identificar?

MPR: En Antioquia, Valle del Cauca y Cundinamarca. (Vea cuáles son los cementerios visitados y cuántos cuerpos encontraron sin identificar en cada uno de ellos).

VA: ¿Qué siguecon los casi 6 mil cuerpos sin identificar que están en los cementerios?

MPR: Estamos ad portas de suscribir de nuevo el convenio con Medicina Legal para cruzar información. Compararemos con los 9 mil que ya encontramos para saber cuántos de esos están en el cementerio. No me atrevo a decirlo con certeza pero creemos que son más de 200 que ya podemos saber quiénes son y dónde están.

VA: ¿Por qué se demora tanto el proceso para identificar un cuerpo?

MPR: Por las condiciones de inhumación. No en todos los cementerios están los cuerpos fácilmente ubicables. En otros casos, están enterrados sin que la fosa esté nombrada. Incluso, unos cementerios ya no existen porque se los ha llevado el río. Ha sido dispendioso y nos ha exigido tener 18 antropólogos forenses del Ministerio del Interior dedicados exclusivamente a hacer ese trabajo. También hemos tenido que acudir al sepulturero.

VA: ¿Qué papel desempeñan ellos en la búsqueda?

MPR: Estamos ligados a la memoria del sepulturero. Él recibe el cadáver y decide cómo y dónde enterrarlo. Por eso hemos hecho unos talleres con ellos para capacitarlos sobre cómo enterrar un cadáver y cuál es la precisión de los datos que deben recopilarse para luego identificar a esa persona. Además, han aprendido que no pueden enterrar dos cuerpos en una sola fosa.

VA: Después de la identificación, viene la entrega. ¿Cómo encontrar a las familias?

MPR: La primera fuente son las redes de familias que buscan a sus seres queridos. Tenemos que tener mucho cuidado. No podemos sacar letreros públicos. Sino informarle a la gente que puede acudir a tal cementerio por información. Otra acción complementaria es el banco de perfiles genéticos que se creó con el Decreto 303 de 2015.

VA: Es decir…

MPR: Las familias podrán acudir al banco si buscan un ser querido y dar su ADN. Cuando logremos sacar el ADN de unos restos mortales, podremos cruzarlos en el banco. Esa es una fuente de identificación.