Hugo Aguilar: el héroe que se convirtió en villano

      
La Corte Suprema condenó a Hugo Aguilar  a nueve años de prisión por haberse aliado con paramilitares para llegar a la Gobernación de Santander en 2003. Por cambiar versión, varios desmovilizados podrían salir de Justicia y Paz.

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El coronel (r) y exgobernador de Santander, Hugo Heliodoro Aguilar Naranjo, fue inhabilitado para ejercer cargos públicos por la Procuraduría en 2011 por 20 años. FOTO: Archivo Semana.     

Hugo Heliodoro Aguilar Naranjo, el coronel en retiro reconocido en los años novena por su exitosa persecución contra el narcotraficante Pablo Escobar Gaviria, ahora deberá pagar una sentencia de 9 años de prisión por su relación con los paramilitares, lo que posibilitó su llegada a la Gobernación de Santander en las elecciones de octubre de 2003. (Descargar sentencia completa aquí)

El exdirigente político, quien también es el padre del actual gobernador de ese departamento, Richard Aguilar, había logrado honrosas distinciones cuando salió en todos los medios como el oficial de la Policía que encabezó el operativo que puso fin a la era del capo del Cartel de Medellín. Veinte años después su nombre aparece junto al de los políticos que se aliaron con grupos de autodefensa para ocupar cargos públicos de elección popular.

El exgobernador está recluido en la cárcel Picota de Bogotá desde julio de 2011. La sentencia de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia también determinó imponerle al general en retiro una multa de 10.750 salarios mínimos.

Los magistrados además ordenaron remitir copias a la Fiscalía de Justicia y Paz para que “investigue y evalúe” si algunos desmovilizados incurrieron en el delito de falso testimonio por haberse retractado en sus declaraciones durante el juicio contra Aguilar, lo que fue visto como una estrategia para favorecer al exmandatario santandereano.

Los postulados sobre los que se podría solicitar la exclusión del proceso de Justicia y Paz son Iván Roberto Duque, alias ‘Ernesto Báez’, ex jefe político del Bloque Central Bolívar; Juan Fernando González; Jesús Enrique Gutiérrez; y Gustavo Gutiérrez. (Ver nota relacionada aquí
)

De policía a ‘parapolítico’
Aguilar nació en Suaita, Santander, y cobró protagonismo el 2 de diciembre de 1993, cuando las cámaras de televisión lo enfocaron exhibiendo el cadáver de Pablo Escobar Gaviria sobre el techo de una casa del barrio Laureles, en Medellín. El hoy condenado, entonces mayor de la Policía e integrante del Bloque de Búsqueda, se jactaba de haberle dado el tiro de gracia al jefe del Cartel de Medellín.

Con esa popularidad y estando en retiro como coronel, Aguilar conoció a Luis Alberto Gil Castillo, un maestro del Sindicato de Educadores que había militado en el M-19, y lo apoyó en la creación del movimiento Convergencia Ciudadana. Después de que Gil llegó dos veces a la Asamblea de Santander y de que su esposa Doris lo sucedió en la duma, el movimiento acordó apostarle a las elecciones de Congreso de 2002 y a las regionales de 2003.

Siendo Santander una región afin al partido Liberal, Convergencia los derrotó en ambas elecciones. Gil llegó al Senado en 2002 junto a los representantes José Manuel Herrera Cely y Jaime Durán Barrera, y en 2003 Hugo Aguilar lo hizo en la Gobernación, derrotando con 301.288 votos a su contrincante, Luis Francisco Bohórquez, del partido Liberal, quien obtuvo 274.135 votos.

La popularidad de Convergencia iba en aumento. En 2006 Gil repitió curul en el Senado y consigo llevó a Alfonso Riaño, José Manuel Herrera Cely y Édgar Alfonso Gómez Román a la Cámara. En 2007, querían repetir en la Gobernación pero Didier Tavera, ex Secretario de Gobierno y candidato de Hugo Aguilar, no pudo superar a Horacio Serpa.

A partir de 2007, la fama de Aguilar y Convergencia se vino al piso. Al exgobernador empezaron a airearle presuntos malos manejos administrativos relacionados con la adjudicación irregular de contratos en la industria Licorera de Santander y en la apuesta del chance; la construcción de una ostentosa mansión en un lugar exclusivo de la ciudad y de una hacienda similar a su proyecto insignia: el Parque Nacional Chicamocha (Panachi). También lo señalaron de presuntos pagos de nóminas paralelas entre amigos y familiares de políticos que apoyaron su campaña. Todas estas denuncias no prosperaron.

En medio de esos señalamientos, él y varios de sus amigos terminaron enredados en medio del escándalo de la ‘parapolítica’. Tres de sus principales congresistas, Luis Alberto Gil, Alfonso Riaño y José Manuel Herrera Cely, terminaron en La Picota investigados por presuntos nexos con los paramilitares.

La promesa a ‘Ernesto Baez’
En enero de 2011 la Procuraduría inhabilitó por 20 años a Hugo Aguilar para ejercer cargos públicos, después de considerar que existían pruebas de que se alió con los paramilitares de Santander y Puerto Boyacá para ser elegido Gobernador de Santander. Una de las exigencias que evidenciaba esta alianza fue el nombramiento de Bonel Patiño Noreña como Secretario de Educación Departamental, al parecer por un acuerdo previo con ‘Ernesto Báez’.

Según el Ministerio Público, Aguilar Naranjo contó con el apoyo del Bloque Central Bolívar (Bcb), bajo el mando de Carlos Mario Jiménez alias ‘Macaco’, Rodrigo Pérez alias ‘Julián Bolívar’ y ‘Ernesto Báez’, así como de las Autodefensas de Puerto Boyacá, lideradas por Arnubio Triana Mahecha alias ‘Botalón’.

Al ganar las elecciones, en consideración del Ministerio Público, Aguilar le prometió a ‘Báez’ un puesto en su gabinete. Uno de los testimonios que pesan en contra del exGobernador fue precisamente el de Patiño Noreña: “A mí, Iván Roberto, alias ‘Ernesto Báez’, me dijo: “A nosotros nos van a dar una Secretaría, yo voy a pedir la de Educación para que usted vaya allá”, le dijo el Secretario de Educación a la Fiscalía.


Los otros testigos contra Aguilar
A pesar de que seis testigos se retractaron y cambiaron su versión sobre los vínculos del exgobernador Aguilar con los paramilitares, otros sostuvieron sus señalamientos. En la última etapa del juicio, los exjefes paramilitares Salvatore Mancuso y Edwar Cobos Téllez, alias ‘Diego Vecino’ ratificaron que estuvieron presentes en una reunión que se realizó en el piedemonte antioqueño entre los principales jefes paramilitares y políticos de diferentes regiones del país, entre los que se encontraba el exgobernador Hugo Aguilar.

Según la versión de Mancuso, el encuentro ocurrió porque a finales de 2001 los jefes paramilitares se reunieron en ‘La 21’, un campamento de los Castaño, para definir cómo iban a intervenir las autodefensas en las elecciones al Congreso de 2002.

“Recuerdo la presencia de Hugo Aguilar porque había escuchado con anterioridad de ‘Don Berna’ y de ‘Vicente Castaño’, las historias de cómo el excoronel Aguilar les había ayudado en la lucha en contra de Pablo Escobar”, señaló Mancuso, aclarando que para ese entonces varios jefes paramilitares se aliaron bajo la denominación de los Pepes (Perseguidos por Pablo Escobar) para derrotar al narcotraficante. Agregó que en esa reunión Aguilar estuvo acompañado por el exsenador Luis Alberto Gil.

En la sentencia que condenó al exsenador Gil por parapolítica consta una versión entregada por Robinson Rueda Vargas, quien fue concejal del municipio del Carmen de Chucurí y luego se desmovilizó como parte de la estructura paramilitar del Bcb, en la que se refiere a un encuentro entre ‘paras’ y políticos en San Rafael de Lebrija, Santander entre octubre y noviembre de 2001.
 
Según Rueda a la reunión asistió Hugo Aguilar con Alfonso Riaño Castillo y otros tres políticos, además de los exparamilitares Orlando Caro Patiño, alias “Gonzalo”, Jairo Ignacio Orozco González alias ‘Tarazá’ y Arnubio Triana Mahecha alias ‘Botalón’. El objetivo del encuentro era preparar las listas de candidatos para las elecciones de 2002.

David Hernández López alias ‘Diego Rivera’, exjefe paramilitar del Bloque Central Bolívar, dijo a la Corte en audiencia del 15 de febrero de 2011, que los paramilitares del Bcb se aliaron con políticos de Santander para lograr un objetivo trazado desde 2002 por ‘Ernesto Báez’. El testigo agregó que entre los planes estuvo elegir a Hugo Aguilar Naranjo como el Presidente de Colombia  para las elecciones de 2010.

Al respecto también fue llamado a declarar el coronel Julio César Prieto, que aunque dijo no tener pruebas de los vínculos del exgobernador con paramilitares, sí habló de los choques que tuvo con Aguilar por combatir el paramilitarismo, cuando fue comandante del Batallón Luciano Del’Huyer.

El oficial contó que dirigió el batallón entre el 8 de diciembre de 2003 y el 8 de diciembre de 2005. Apenas asumió el mando, dijo, los paramilitares le ofrecieron 40 millones de pesos al mes y cinco muertos con fusil (para presentarlos como mal llamados “falsos positivos”), a cambio de que no los persiguiera. Al rehusarse, “los paramilitares empezaron a asesinar a las personas que tildaban cercanas a mí”, contó.

Después de incautarles armas, destruirles al menos 10  laboratorios coca y capturar a varios de sus cabecillas, el coronel Prieto contó que en octubre de 2004 la clase política lo citó a un consejo de seguridad en presencia del entonces presidente Álvaro Uribe, donde lo acusaron de maltratar a la población civil. “En realidad, buscaban mi traslado. En esa reunión estuvieron Hugo Aguilar, Luis Alberto Gil, Luis José Arenas, Miguel de Jesús Arenas, Carlos Higuera Escalante y Óscar Josué Reyes. Yo interpreto que mis acciones operativas les resultan incómodas”, dijo el testigo.

Aunque el coronel Prieto logró mantenerse en el cargo un año más, aseguró que la clase política de la región le insistió al presidente Uribe y al mando militar de la época que lo relevaran.

La familia Aguilar y la política local
El año 2003 fue definitivo para la expansión política del partido Convergencia Ciudadana, al que pertenecía Hugo Aguilar y más adelante dos de sus hijos. Como lo expuso la Corte Constitucional en la Sentencia contra Luís Alberto Gil Castillo y el ex representante a la Cámara Alfonso Riaño, este crecimiento estuvo ligado al respaldo que los paramilitares del Bcb le dieron a sus candidatos.

Ese año no solo fue elegido Hugo Aguilar como gobernador de Santander, sino que consiguió nueve alcaldías, pasando del anonimato a ser el noveno partido más votado del país. A pesar de que la fuerza política estaba en Santander los alcaldes elegidos pertenencia a municipios de otros lugares del país que tenían fuerte presencia paramilitar como la capital de Arauca, Carepa, en Antioquia, y Puerto Boyacá y Muzo, en Boyacá. También obtuvieron siete diputados y 317 concejales, 143 en Santander. En el Senado pasaron de tener una curul en 2000 a siete en las elecciones de 2006. 

Luego de que comenzaran las investigaciones por parapolítica contra los miembros de Convergencia Ciudadana, a finales de 2009 este partido decidió cambiar de nombre y logo, y para ello se fusionó con otros partidos cuestionados como Colombia Democrática, Colombia Viva, Alianza Democrática Nacional y Apertura Liberal, también salpicados por el escándalo de la parapolítica, y lo decidieron llamar Partido de Integración Nacional (PIN).

A pesar de que Convergencia despareció, Hugo Aguilar no perdió el poder político en Santander. En las elecciones al Congreso de 2010 llegó al Senado uno de sus ocho hijos, Nerthink Mauricio Aguilar, quien obtuvo  49.382 votos, la cuarta votación más alta del PIN, sin siquiera haber sido edil ni tener una carrera política. También logró una curul en la Cámara de Representantes con su fórmula Hólger Díaz, quien fue secretario de Desarrollo y Gobernador (e) de Santander durante la administración de Aguilar.

Para las elecciones regionales de 2011, Hugo Aguilar esperaba repetir como Gobernador de Santander. En enero le dijo a Caracol Radio que se iba a postular no por el PIN sino que se reuniría con expresidente Álvaro Uribe para que avalara su candidatura por el Partido de la U. Pero tras la sanción de la Procuraduría, sus planes cambiaron y le propuso a otro de sus  hijos, esta vez Richard Aguilar de 29 años, quientampoco tenía una carrera política y se desempeñaba como cónsul en Chile, que se presentara a la contienda.

En plena campaña política fue capturado Hugo Aguilar y aunque muchos pensaron que el exgobernador no podría ganar la contienda desde la cárcel, Richard logró reunir 80 mil firmas para respaldar su candidatura por medio de la organización “Santander en Serio”, que también fue el lema de gobierno de su padre.

Richard Aguilar fue elegido gobernador de Santander con más de 477 mil votos, la votación más alta que se hasta ahora en el departamento. En su discurso de victoria sus primeras palabras fueron: “Santander también eligió a Hugo Aguilar”.