‘Gaitanistas’ demuestran su poder regional

      

El “paro armado”convocado por las llamadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia como represalia por la muerte de Juan de Dios Úsuga, alias ‘Giovanni’, provocó el colpaso del comercio y el transporte en zonas de 6 departamentos.

Montaje: Verdadabierta.com

El comercio, las fincas bananeras, las carreteras y las calles de los pueblos están deshabitadas porque todas las personas tienen miedo de salir de sus casas luego de que con llamadas, visitas y panfletos Los Urabeños decretaran un “paro armado”. En Magdalena, Antioquia, Chocó, Córdoba, Sucre y Bolívar se manifestó el poder que pocos le concedían a esta banda criminal.

El paro inició a las 12:00 a.m. y se extenderá por 48 horas más. En la información que contenían los panfletos, las llamadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia (Agc)  dejaban claro que toda la población debía estar de luto por la muerte de Juan de Dios Úsuga David, alias ‘Giovanni’ quien fue abatido en una operación realizada por la Policía Nacional, el pasado 1 de enero en Acandí, Chocó y que fue enterrado en Pueblo Nuevo, Necoclí.

Además resaltaron que el paro había sido convocado porque, según ellos, en el momento de la muerte de alias ‘Giovanni’ no se le habrían respetado sus derechos y al parecer habría sido fusilado delante de su familia.

Varias fuentes consultadas por VerdadAbierta.com afirmaron que este paro “revela la capacidad operativa de los ‘Gaitanistas’ y de sometimiento de la población civil, ya no necesitan hacer grandes matanzas para asustar y parar por completo una población”.

Como pueblos fantasmas se ven los municipios de Valencia y Tierralta en el Alto Sinú; Montelíbano, San José de Uré y Ayapel en el Alto San Jorge; San Pelayo en el Medio Sinú, todos en el departamento de Córdoba. Apartadó, Carepa, Turbo, Necoclí, Chigorodó y Arboletes en el Urabá antioqueño.

En Chocó los pueblos de Istmina, Condoto, Las Ánimas y San Juan recibieron amenazas. También se vieron afectados los municipios de Guaranda y Majagual en la Mojana sucreña, Achí y San Jacinto del Cauca en la Mojana bolivarense. Santa Marta, en el Magdalena, también está amenazado.

La reducción en el transporte y en las actividades comerciales también ha sido visible en diferentes poblaciones del occidente de Antioquia que como Cañasgordas, Frontino y Dabeida conducen al Urabá y en la vía para el Bajo Cauca, Puerto Valdivia y Caucasia, donde a partir de las 2:00 p.m. se ordenó cerrar todo el comercio según fuentes del municipio.

En la horas de la tarde llegó la orden del paro a la Comuna 13 de Medellín y no se descarta que esas mismas presiones se vayan a ejercer en otros corregimientos donde al parecer los ‘Gaitanistas’ hacen presencia. En el barrio La Sierra, San Javier y la Comuna 8 se presentaron alteraciones en el comercio y el transporte luego de que los habitantes fueran informados de que Los Urabeños ordenaban el cese total de las actividades.

Entre Palmitas y San Cristobal, en las horas de la noche, una buseta fue quemada luego de que hombres armados detuvieran el vehículo y obligaran a bajar a los 20 pasajeros que utilizaban este medio de transporte. Lo mismo sucedió en Aguas Frías donde dos taxis fueron quemados en los sectores de La Isla y Guarentos.

Según el general José David Guzmán, comandante del Departamento de Policía en Antioquia, “el poder intimidatorio de Los Urabeños es altísimo, el antecedente que hay de ellos atemoriza”.

Es aún más grave el hecho de que en estos municipios la presencia de la Policía y el Ejército no es garantía de seguridad. “El éxito del paro se debe al trabajo que hicieron estas estructuras en el pasado, generan tanto pánico que las personas prefieren quedarse encerradas en la casa”, narró una de las personas entrevistadas.

Luis Fernando Quijano, presidente de la Corporación para la Paz y de Desarrollo Social (Corpades), explicó que “el significado de esta situación es mostrar el poder militar de Los Urabeños y la injerencia que tienen sobre la población que debido al miedo o a otros factores reconoce su capacidad intimidatoria. Lo que sirve para cuestionar la premisa institucional de que Los Urabeños no tienen poder, son pocos y están opacados”.

El caso del Urabá antioqueño es muy preocupante. El 99,9 por ciento del comercio está cerrado y de acuerdo a las personas entrevistadas por este portal las fincas bananeras, los transportadores y los comerciantes decidieron parar toda su actividades.

Para Gerardo Vega, presidente de la Fundación Forjando Futuros y representante de los reclamantes de tierras de Urabá, “esta situación es un coletazo de la nueva legislación sobre víctimas y restitución de tierras”.

Para él es la llamada mano negra la que estaría auspiciando el paro con el fin de impedir la restitución de tierras “si dicen representar al pueblo -los ‘Gaitanistas’-, entonces que se pronuncien a favor de la ley de víctimas y de restitución de tierras y respeten también a los reclamantes”.

Vega expresó además que esa organización armada “está buscando legitimidad política cuando todos sabemos que son narcotraficantes, lo que esperamos es que el Estado los someta pues están ejerciendo poder sobre las rutas de tráfico que coinciden con las predios que reclaman los campesinos despojados, particularmente en Urabá”.

El 50 por ciento del transporte está reducido, las empresas de transporte público Gómez Hernández, Transportes Urabá, y Cootrasuroccidente, las cuales tenían previsto despachar buses desde y hacia Medellín, suspendieron el servicio por temor a que sus vehículos sean incinerados y sus conductores y pasajeros puedan resultar heridos.

Sergio Valencia, Coordinador general de despechos de Cootransuroccidente le dijo a VerdadAbierta.com que “en el día no hemos tenido ningún viaje a Urabá por el temor de la gente, los carros están y la Policía nos ofreció el servicio de acompañamiento en caravanas, pero las personas no quieren viajar. Vamos a perder bastante dinero”.

Todo el comercio, incluso los vendedores de minutos a celulares, pararon de trabajar. Luis Enrique Mosquera, personero de Apartadó afirmó que “los bancos funcionaron por la mañana, pero cerraron por la tarde. Las bananeras no están trabajando porque son los primeros sobre los que recaen las amenazas”. La intranquilidad ha ido aumentando a medida que pasa el día.

Algo similar ocurre en el Bagre, municipio del Bajo Cauca. Al medido día dieron la orden de cerrar todo el comercio. “Nos llamaron y nos dijeron que teníamos que cerrar y que no podíamos salir ni por la carretera ni por el río Nechí”, según narró un comerciante del municipio.

Santa Marta fue otro de los lugares en los que el paro armado cambió la cotidianidad. El coronel Wilson Barón Calderón, comandante de la Policía del Magdalena, explicó que el panfleto firmado por las Autodefensas Gaitanistas de Colombia fue llevado al mercado público por dos hombres en moto que amenazaron a los comerciantes y los obligaron a no trabajar. De acuerdo con fuentes de la Secretaría de Gobierno Municipal, se están tomando medidas para evitar acciones contra la población civil.

En Córdoba las procesadoras de leche Colanta, Proleche y Codegán no pudieron comprar leche hoy. Los habitantes de los municipios de Puerto Escondido, Moñitos, Los Córdobas y Canalete, no se atreven a salir de sus casas luego de que los panfletos amenazantes inundaran los cascos urbanos y áreas rurales de estas localidades.

En la zona rural la amenaza para los ganaderos y comerciantes consistía en que todos los productos que subieran o bajaran por el río Sinú o por las carreteras que están a la orilla del afluente los quemarían.

Algunos campesinos afirmaron que los integrantes de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia fueron hasta las tiendas y las casas para advertirles que no podrían trabajar ni salir.

Este grupo nació en 2006 en el Urabá antioqueño y fue comandado Daniel Rendón Herrera, alias ‘Don Mario’, tras la desmovilización de su hermano el exjefe paramilitar Fredy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’ comandante del Bloque Élmer Cárdenas.

Durante estos cinco años este grupo criminal se han ido expandiendo hacia el norte en busca de las rutas del narcotráfico y para llenar los vacíos que dejaron los paramilitares que delinquieron en esa zona del país. En principio se llamaban Héroes de Castaño para luego denominarse Autodefensas Gaitanistas de Colombia.

Tras la captura de alias ‘Don Mario’ en abril del 2009, los hermanos Úsuga David tuvieron el mando del grupo que para ese entonces se llamaba la Banda de Don Mario. El año pasado hicieron una alianza con alias ‘Mi Sangre’ y adoptaron el nombre con el que se les conoce hoy: Los Urabeños.

Medidas de seguridad
Ante estas amenazas, se realizaron diversos Consejos de seguridad para determinar las acciones convenientes. En la mayoría de lugares se determinó restringir, durante 72 horas, el parrillero en las motos y la circulación de estos vehículos, entre las 8.00 p.m. y 6:00 a.m., así como la ley seca, en Apartadó, Chigorodó, Carepa y Necoclí. Adicionalmente se prohibió el porte de armas con salvoconducto. En algunas zonas estas medidas se extenderán hasta el próximo martes.

Tanto la Policía como el Ejército propusieron realizar caravanas para acompañar a la comunidad, los comerciantes y transportadores de la región. Según el comandante de la Policía Antioquia, Coronel José Acevedo, lo que se busca es darle confianza a los habitantes y viajeros de la zona.

La Armada Nacional reforzó la vigilancia en el Golfo de Urabá y movilizó motonaves hasta la frontera con Panamá.

Hasta el momento han sido capturadas 20 personas señaladas de pertenecer a esa banda criminal y les han sido incautadas armas, panfletos y granadas.

Un vendedor de joyas y un vendedor ambulante en Montelíbano, Córdoba, al parecer fueron ejecutadas tras negarse a cumplir las restricciones impuestas por este grupo criminal.

El Alcalde de Santa Marta, Carlos Caicedo Omar, convocó a la ciudadanía para que se movilice y marche en contra de este tipo de acciones. Del mismo modo, Gerardo Vega insistió en que “se necesita más apoyo ciudadano. Así como se marcha contra las Farc se debe marchar contra todas estas bandas criminales”.

El reto de la autoridades es poder devolverle la confianza a la población de estos departamentos que siguen temiendo por sus vidas ante las estructuras armadas ilegales.

Según las autoridades tras la muerte de alias ‘Giovanni’, el mando lo habría asumido Dairo Antonio Úsuga David, su hermano, en compañía de Henry de Jesús López, alias ‘Mi Sangre’, quien había pertenecido a las Autodefensas Unidas de Colombia y que, actualmente, se disputa los espacios y las rutas del narcotráfico con Eric Vargas, alias ‘Sebastián’.

El actual gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, rechazó las acciones criminales y afirmó que “este paro lo único que muestra es el inconformismo de los grupos armados ilegales que buscan de alguna manera rechazar los golpes propinados por la Fuerza Pública”.

No es la primera vez que esta banda criminal muestra todo el poder que tiene.

La primera muestra de poder ilegal se dio en abril del 2005 cuando algunos paramilitares y desmovilizados files a Diego Murillo Bejarano, alias ‘Don Berna’, ordenaron el paro de todas las actividades comerciales como respuesta a su captura en Córdoba. Esa vez más del 90 por ciento el transporte en Medellín se paralizó.

La segunda se llevó a cabo en el año 2008, a principio de octubre en Urabá, Bajo Cauca y Occidente antioqueño, anunciando un paro armado para detener el avance de grupos guerrilleros en la región.

En esa ocasión la región del Urabá se detuvo por completo. Los trabajadores de las fincas bananeras no fueron a laborar, el transporte público no funcionó, los estudiantes no asistieron a clases y algunos comerciantes cerraron sus negocios por temor a amenazas o represalias de la nueva agrupación.

Luego se extendió hasta Nariño, donde en correos electrónicos y bajo las puertas de las casas de las personas y entidades que trabajan por los derechos humanos en ese departamento del sur del país, empezaron a aparecer unos panfletos que anunciaban la llegada del nuevo grupo paramilitar Autodefensas Gaitanistas de Colombia.

Son evidentes las muestras de poder de estos grupos que han sido conformados por exparamilitares, exguerrilleros y narcotraficantes.

A pesar de que su actividad económica se centra en el tráfico de droga, su poder es tan grande que cuando lo consideran necesario pueden detener y someter a quienes se encuentran en su zona de influencia tan sólo diciendo “de aquí no se mueve nadie”.