Las masacres y asesinatos antes de El Naya

      
En la primera versión libre colectiva, 60 exparamilitares del Bloque Calima contaron cómo llegaron a Cauca y confesaron varios asesinatos que cometieron antes de la masacre del Naya de abril de 2001.

60 exparamilitares del Bloque Calima rinden versión libre de manera conjunta.

Los cuatro días que estremecieron a El Naya
Asesinado testigo clave en masacre del Naya

Los hombres bajo el mando de Éver Veloza, alias ‘HH’, exjefe del Bloque Calima de las Autodefensas Unidas de Colombia, empezaron a rendir versión libre para esclarecer cómo fue la masacre en la que asesinaron a por lo menos 50 indígenas, afrodescendientes y campesinos de las 17 veredas que componen la región de El Naya, ubicada entre Cauca y Valle del Cauca.

La Fiscalía 18 de Justicia y Paz reunió a los 60 postulados  de ese grupo armado ilegal que cometieron la masacre en la región entre el 10 y el 13 de abril de 2001, de la que no se conoce una cifra determinada de víctimas. Algunas personas aseguran que los muertos pueden ser más de cien, porque los paramilitares tiraron a sus víctimas por barrancos.

En el primer día de estas audiencias que están programadas hasta el próximo 8 de abril, los encargados de responder los cuestionamientos de la Fiscalía fueron los exjefes Elkin Casarrubia Posada, alias ‘El Cura’; Juan Mauricio Aristizábal Ramírez, alias ‘El Fino’; Jair Alexander Muñoz Borja, alias ‘Sisas’; José de Jesús Pérez Jiménez, alias ‘Sancocho’; y Yesid Enrique Pacheco Sarmiento, alias ‘El Cabo’.

Alias ‘El Cura’, quien fue segundoal mando de ‘HH’ y jefe militar del Bloque Calima, contó que él y sus hombres llegaron al departamento de Cauca por solicitud del extraditado narcoparamilitar Francisco Javier Zuluaga Lindo, alias ‘Gordo Lindo’.

Según contó el exjefe paramilitar, entre enero y febrero de 2000, él y alias ‘Luis’ -quien fue uno de los primeros superiores del Bloque junto con David Hernández Rojas, alias ’39’-, se reunieron con ‘Gordo Lindo’ en una finca entre San Pedro y Buga, Valle.

Supuestamente ‘Gordo Lindo’ les dijo a los jefes paramilitares que “un grupo de personas estaban pidiendo presencia de las autodefensas en Corinto”. Al respecto, ‘El Cura’ dijo que ‘Gordo Lindo’ no indicó a qué grupo de personas se refería, si eran empresarios, ganaderos o narcotraficantes.

A raíz de esa reunión con ‘Gordo Lindo’, los paramilitares enviaron un grupo de 54 hombres que estaban en la zona rural de La Marina y Pardo Alto en Tuluá, bajo las órdenes de ‘El Cura’.

El exjefe paramilitar contó que el extraditado narcotraficante se hizo a cargo del sostenimiento del grupo y que estando en Cauca les envió armamento. Inicialmente el grupo paramilitar se asentó en los corregimientos de Timba, ubicados respectivamente en Jamundí, Valle, y Buenos Aires, Cauca.

Poco a poco el grupo se fue expandiendo por el norte de Cauca y ubicaron hombres en varios cascos urbanos. José de Jesús Pérez Jiménez, alias ‘Sancocho’, quien fue nombrado como jefe de urbanos en Cauca, contó que inicialmente los urbanos eran alrededor de 15 ubicados en los Timbas y Santander de Quilichao.

Para finales de 2000 los paramilitares fueron ganando territorio y ‘Sancocho’ ubicó paramilitares en Puerto Tejada,  Villa Rica, Paso de la Bolsa, Mondomo, La Balsa, Lomitas y San Miguel. A comienzos de 2001 el Bloque Calima continuó su expansión en Cauca y mandaron urbanos a Popayán, El Bordo, Rosas, Tambo y San Joaquín.

Crímenes antes de El Naya
Los exjefes paramilitares mencionaron algunas masacres y crímenes que cometieron antes de la masacre de El Naya en abril de 2001.

La primera ocurrió en enero de 2001, cuando entraron a Betulia, en Suárez, y según lo contado por ‘El Cura’, asesinaron a cinco personas. En esa ocasión los paramilitares saquearon la tienda de una de sus víctimas y otras viviendas.

‘El Cura’ también contó que en febrero de ese año salió con un grupo de paramilitares y una informante a hacer una “operación” al corregimiento de El Palo, ubicado en Caloto. En esa ocasión los paramilitares asesinaron a seis personas en un recorrido que terminó en Mata Redonda, cuando fueron atacados por la guerrilla.

En ese trayecto desde El Palo, los paramilitares aseguraron que llevaron a un informante quien les fue señalando a sus víctimas. En esa región retuvieron y asesinaron a una pareja que se encontraron antes del enfrentamiento con la guerrilla y botaron 50 kilos de coca que habían robado.

Alias ‘Sancocho’ contó que ese mismo día, otro grupo de paramilitares asesinaron a tres personas en la vereda El Toro, ubicada en Santander de Quilichao. No dijeron porqué lo hicieron.

Este jefe de sicarios también dijo que la ola de crímenes que desataron en la región ocasionaron que cientos de personas se desplazaran de Timba, Cauca, en diciembre de 2000, cuando varios paramilitares de ese departamento salieron como refuerzo de los grupos que estaban cometiendo la masacre de Barragán, Tuluá, Valle del Cauca.

Según contó el postulado, como en el norte de Cauca quedaron pocos paramilitares, les dijo a algunos transportadores que 300 hombres del Bloque Calima iban a hacer una masacre por Timba, para que los habitantes se asustaran al verlos cuando se dirigían hacia Barragán, y se fueran para que llegara el Ejército a proteger la zona a causa del desplazamiento.

Estos crímenes serán confesados detalladamente en posteriores audiencias.