Bloque Calima

      
El más cercano antecedente del paramilitarismo en el Valle del Cauca se encuentra hacia finales de la década de los ochenta e inicios de los noventa, cuando los clanes del narcotráfico deciden expandir su control territorial a ciertas zonas, lo cual se traduce en una confrontación directa con organizaciones sociales, campesinas, y desde luego con las guerrillas de las Farc y Eln (1).
Miembros del Bloque Calima durante su desmovilización, entregan su armamento al gobierno. Foto: Prensa Alto Comisionado para la Paz.

Bajo este contexto ocurre la denominada masacre de Trujillo, cuando entre 1988 y 1994, en los municipios de Trujillo, Bolívar y Riofrío, noroccidente del departamento del Valle, se registraron, según los familiares y organizaciones humanitarias, 342 víctimas de homicidio, tortura y desaparición a causa de una alianza macabra entre ejércitos privados de narcotráfico y la Fuerza Publica (2).

Hacia mediados de la década del noventa el Cartel de Cali empieza su desintegración, y de ésta surge el Cartel del Norte del Valle. Este grupo de narcotraficantes sería uno de los factores que explicaría la llegada de las Auc al Valle en el año 1999. Su involucramiento con las recientemente creadas Auc es notoria y en ella cumplen un papel importante Diego Fernando Murillo, alias ‘Don Berna‘ y Vicente Castaño, alias ‘El Profe‘. El primero miembro del Cartel de Medellín, fundador de los Pepes, y el encargado de llevar a buen término la alianza entre los enemigos de Escobar al interior del Cartel de Medellín, y los narcotraficantes del Valle, para buscar la muerte del capo. Y por otro lado, Vicente Castaño, hermano mayor del clan Castaño y el encargado de diseñar la expansión de las Auc a través de la venta de franquicias, de la cual muchos narcotraficantes fueron sus principales clientes.

La primera acción pública de las Auc se da en julio de 1999 con el asesinato del campesino Orlando Urrea, de 45 años, y de su hija Patricia, de 18, en zona rural de Tuluá. Dicha incursión se presentó dos meses después del secuestro masivo en la iglesia La María, cuando miembros del Eln retuvieron a 170 personas (3).
Inicialmente el Bloque ‘Calima’ tuvo varios comandantes, entre ellos estaban ‘Rafa Putumayo‘, quien tuvo que huir de la región y posteriormente sería uno de los comandantes del Bloque ‘Sur Putumayo‘; alias “Román” – sargento retirado del Ejército-, quien sería asesinado en julio de 2000 y alias “José”, un mayor retirado del ejercito quién sería el encargado de delegarle el mando a ‘H.H’.

En su versión libre, ‘H.H’ dijo que la llegada de las Auc al Valle “se da por el pedido de los empresarios de la región que debido al intenso accionar de la guerrilla recurren a los Castaño para que envíen un grupo de autodefensas” (4). Sin embrago, ante la falta de recursos económicos, ‘Don Berna’ y ‘Vicente Castaño’, decidieron acudir a los narcotraficantes de la región. Es así como en el año 2000, en una finca de Cartago estos dos paramilitares, en compañía del propio ‘H.H’ y de ‘Ernesto Báez se reunieron con Diego Montoya, alias ‘Don Diego’, Arcángel Henao, alias ‘El Mocho’, Hernando Gómez, alias ‘Rasguño’, ‘Gordo Lindo’ y otros narcos de la región. Con este impulso y una activa colaboración de algunos miembros de la fuerza pública, el Bloque Calima inició su etapa de consolidación en el Valle y el norte del Cauca.

La primera acción de trascendencia se da en diciembre de 2000 con la incursión a Barragán, Tulúa, en búsqueda de “Pablo Catatumbo”, uno de los comandantes del Comando Conjunto de Occidente de las Farc.

En esta etapa ‘H.H’ tiene la tarea de crear el frente Pacífico del Bloque Calima. Inicialmente la expansión debería orientarse para llevar los paramilitares a Buenaventura y al litoral pacífico del departamento, con la idea también de llegar a Cauca y Nariño, y controlar las rutas del narcotráfico en todas esas costas. El propio ‘H.H’ relata que Vicente Castaño detiene este proceso y le ordena entregar la zona de Nariño al Bloque ‘Central Bolívar’ al mando de alias ‘Macaco‘ y ‘Pablo Sevillano‘.

Al Cauca llegan inicialmente al corregimiento de Timba, municipio de Buenos Aires. Allí en junio de 2000, miembros del Bloque al mando del propio ‘H.H’ incursionan en las veredas Ventura y San Francisco y asesinaron a 12 personas, algunos de cuyos cuerpos fueron arrojados al río Cauca. Posteriormente el Bloque avanza por la cordillera central hasta límites con Nariño.

Entre el año 2000 y su desmovilización en 2005 el grupo realizó al menos 70 masacres, dejó centenares de víctimas, produjo el desplazamiento de más de 20 mil personas, asesinó de manera selectiva a 400 líderes sindicales, cívicos, docentes y campesinos, y en la actualidad se cree que existen más de 400 fosas comunes con víctimas del Bloque (5).

Entre las principales masacres están (6):

 

 

 

 

 

  • 1999: Los paramilitares llegaron este año a Bugalagrande, Tuluá, San Pedro y Buga. Fueron cometidas once masacres y siete homicidios selectivos.
  • 2000: Fue el año de la expansión, incursionaron a Sevilla, Trujillo, Palmira, Pradera, Florida, Jamundí, Buenaventura y el norte del Cauca. Cometieron 30 masacres y 13 homicidios selectivos.
  • 2001: Este año se presentaron once masacres, entre ellas el Naya y La Habana, y doce homicidios selectivos. La influencia se amplió a Restrepo, Calima-El Darién y Vijes.
  • 2002: Ocurrieron trece masacres y ocho homicidios selectivos. La mayor cantidad ocurrieron enPalmira, Florida y Pradera.
  • 2003: Se cometieron tres masacres y cinco homicidios selectivos. La gran influencia estuvo en Buenaventura.
  • 2004: Se reportaron dos masacres y tres homicidios selectivos. Fue el año en que el ‘Bloque Calima’ se desmovilizó.

 

Con la llegada de ‘H.H’ el organigrama del grupo cambió. ‘H.H’ se convirtió en el nuevo comandante, Elkin Casarrubias, ‘El Cura’, asumió como segundo al mando. Y se dividieron las zonas en cuatro frentes. El norte del Cauca y Jamundí era manejado por José de Jesús Jiménez, alias ‘Martín’ o ‘Sancocho’; el centro del Valle quedó a cargo de ‘El Cura’; Palmira, Florida y Pradera las manejó ‘Geovany’, y Buenaventura estaba bajo el mando de ‘Félix’. Asimismo, alias ‘Fernando’ quedó encargado de manejar las relaciones con los políticos (7).

Orgánicamente y según ‘H.H’, el Bloque tenía la siguiente estructura: Frente Cacique Calarcá (Sevilla, Bugalagrande, Andalucía; el Central (Tulua, Buga, Río Frío, Trujillo); Frente Pacífico (Calima Darién, Dagua, Restrepo, Cisneros, Buenaventura); Frente Farallones (Jumbo, sur del Valle y norte del Cauca) (8).

La Fundación Seguridad y Democracia por su parte describía así su estructura (9): El frente Mártires de Ortega, al mando de Elkin José Casarrubia, alias “El Cura” compuesto por 120 hombres y con presencia de los municipios de Jamundí en el Valle, Buenos Aires, Timba, Suárez, Morales y Cajibío en el Cauca; el frente Cacique Calarcá, cuyo comandante es alias “Giovanni”, opera en municipios de Tulúa, Buga, San Pedro, Sevilla, Caicedonia, Bugalagrande, Buenaventura y la vía la mar, así como en Génova (Quindío) con 400 paramilitares; el frente Calima al mando de alias “Hernán Hernández” con 280 hombres e influencia en el área del corregimiento de los Cristales en el municipio de Río Frío, el corregimiento de Chicoral en Bugalagrande y los corregimientos de San Rafael, Santa Lucía, La Marina y Barragán del municipio de Tulúa; y el frente Pacífico con 100 paramilitares dirigidos por el suboficial retirado del Ejército, Bellaisad Durán, con presencia en Buenaventura y Dagua.

Según ‘H.H’, la principal fuente de financiación del ‘Bloque Calima’ era el narcotráfico: “nos pagaban 50 dólares por kilo de coca que sacaban” (10). Además tenían los aportes de empresarios de la región.

El Bloque Calima se desmovilizó el 18 de diciembre de 2004, en la finca “El Jardín”, ubicada en el corregimiento de Galicia, municipio Bugalagrande, Valle, con 564 miembros y entregó 451 armas.

(1) Álvaro Guzmán y Renata Moreno. Autodefensas, narcotráfico y comportamiento estatal en el Valle del Cauca. En: Parapolítica. La ruta de la expansión paramilitar y los acuerdos políticos. Bogotá: Corporación Nuevo Arco Iris, Cerec y Asdi, 2007; p. 171-172.

(2) CNRR- Área de Memoria Histórica. Trujillo: una tragedia que no cesa. Bogotá: Editorial Planeta, 2008; p. 15.

(3) Historia de la incursión ‘para’ en el Valle. Especial multimedia de El País. Ver: http://www.elpais.com.co/paisonline/especiales/paramilitares/cronologia.html

(4) “Empresarios trajeron las AUC al Valle”. El País, 28 de enero de 2008.

(5) Historia de la incursión ‘para’ en el Valle. Especial multimedia de El País. Op. Cit.

(6) Así fue la llegada de los ‘paras’ al Valle. El País, 2 de marzo de 2008.

(7) Ibíd.

(8) Entrevista de VerdadAbierta con alias HH. Agosto 1 de 2008.

(9) Fundación Seguridady Democracia. Desmovilización del bloque Calima de las AUC. En: http://www.seguridadydemocracia.org/docs/pdf/conflictoArmado/Desmovilizaci%C3%B3nCalima.pdf

(10) Entrevista de VerdadAbierta con alias HH. Agosto 1 de 2008.